El Papa que sonríe


No soy ateo, no. Soy agnóstico, que para mucha gente parecería ser lo mismo, pero no, yo tengo fe como Palito Ortega, pero no me enlisto en ninguna religión en particular. La diferencia radica en que el ateo no cree en Dios, mientra que el agnostico no puede demostrar que Dios existe, pero tampoco puede demostrar lo contrario, por tanto no niega que Dios pudiese existir. Empirismo puro.
El no estar bautizado, no crea que tiene alguna contra, que vá, solo debo utilizar mi libre albedrío (un regalo de Dios según la cristiandad) y elegir o no lo que más se acerque a mi corazón. Todo gracias a mi viejo que se opuso a que me obligaran a ingresar a una religión de manera inconsulta y hereditaria.
Sin embargo reconozco en la religión su función principal, que fuera de las cuestiones de fé necesarias, más tienen que ver con la educación en el respeto de normas de convivencia que nos alejen de la barbarie y la anarquía y convertirse en el apoyo psicológico de las masas.
A quienes siguen alguna religión particular les envidio respetuosamente esas muletas del alma que reciben gratuitamente solo por dejar lo analítico y volcarse a la credulidad.
Hacen uso del primer servicio de psicología gratuito de la humanidad.
Así que dicho todo esto usted podrá entender que no me interese particularmente el tener un Papa argentino, si bien me enorgullece y me alegra que sea un Papa que obra según dice, sea cálido, humano y lo principal e importante, que los fieles católicos y no católicos lo respeten y quieran.
Pero entendamos que si la iglesia va por la educación de la masa para alejarla de la barbarie, resulta lógico que un gobierno que opta por la destrucción de los valores societarios y promueve la anarquía institucional, la mentira sistemática y la corrupción en todas las esferas, se oponga e ignore todo lo que tenga que ver con ella.
El día que se conoció la identidad del nuevo Papa lo primero que hice fue poner un comentario irónico en mi muro de Facebook.


Claro, pongo muchos comentarios así, pero de éste estaba muy seguro y a las pocas horas comenzaron a conocerse las reacciones de los bloques alineados con la anti-religión demostrando que no me había equivocado.
Y aunque tarde se dieron cuenta de cuanto la habían pifiado y revirtieron su posición para no perder el 82% de votantes católicos, lo dicho dicho está y no hay que olvidarse.


Luis D'Elía dijo: "Francisco es a América Latina lo que Juan Pablo II fue a la Unión Soviética, el nuevo intento del imperio por destruir la unidad latinoamericana" o un twitter donde dice "Paren un poco, Francisco recién está asumiendo y Videla ya pide un golpe de Estado"
Horacio Verbitsky dijo entre otros ataques: "En la Silla Apostólica no se sentará un verdadero franciscano sino un jesuita que se hará llamar Francisco, como el pobrecito de Asís. Su biografía es la de un populista conservador, como lo fueron Pío XII y Juan Pablo II: inflexibles en cuestiones doctrinarias pero con una apertura hacia el mundo, y sobre todo, hacia las masas desposeídas" que "intentó unificar la oposición contra el primer gobierno que en muchos años adoptó una política favorable a esos sectores".
Otros saltaron al ruedo como el gobernador de Río Negro que dijo “No sé qué aporte ha hecho la Iglesia argentina para que lo hayan (a Bergoglio) nombrado Papa"
Estela Carlotto dijo : “Bergoglio representa esa Iglesia que oscureció la historia del país”. Y no se ha desdicho.
Otros, más vivos y previendo el futuro, supieron ocultarse en la ambigüedad como el filósofo oficial Ricardo Forster quién prefirió decir: “No es lo mismo Jorge Bergoglio que el Papa Francisco. Ahí hay una mutación (¿¡!?)
Verbitsky, Weretilneck y Carlotto dicen lo que el kirchnerismo íntimamente siente, Forster lo que le conviene al kirchnerismo decir , D'Elía lo dice pero recula  arrepentido de quedar al descubierto y Cristina se baja del caballo, agacha la cabeza y corre a besarle el anillo al único argentino que la superó en poder y no quiere utilizarlo en su propio beneficio.


Pero el Gobierno no tiene ninguna prueba para acusar a Bergoglio de haber colaborado con la dictadura, todo lo contrario, se siguen sumando declaraciones de gente de valía como el premio nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel y la madre de desaparecidos e integrante de la CONADEP Graciela Fernández Meijide, indicando que por el contrario, obró ayudando a los perseguidos por la misma. 
Pero básicamente los ultracristinistas solo tienen la sospecha de que no hizo "lo suficiente" para proteger a dos seminaristas franciscanos que fueron secuestrados por las Juntas Militares.
Claro que los propios funcionarios kirchneristas no aplicarían a la misma regla ?
Alicia Kirchner fue funcionaria en Santa Cruz durante el Proceso y no hizo lo suficiente; Timerman dirigió un diario que salió para apoyar al golpe militar y no hizo lo suficiente y el juez Zaffaroni juró por los Estatutos de la Revolución Argentina y tampoco hizo lo suficiente. Sólo para citar tres casos entre cientos de insuficientes.
Los Kirchner, por ejemplo, ambos abogados, durante esos años jamás presentaron ni un hábeas corpus o defendieron a un preso político.
Igual, Cristina, dirigiéndose al flamante Papa Francisco -al cual ninguneó, boludeó y dejó plantado mil veces- dijo que este gobierno siempre optó por los que menos tienen, y eso es lo que sus presuntos enemigos -incluyamos al nuevo Papa- no le perdonan. Toda una declaración de bienvenida.


Telam y 678 por medio, junto a manos anónimas, difundieron en las redes sociales una foto en la que un supuesto Bergoglio le daba la comunión a Jorge Rafael Videla. Bulo que se cayó por sí solo al analizar que el Papa ahora con 76 años, por aquellos días debía tener cerca de 38, y no daba para nada el fisic du roll del cura escrachado en la foto. En realidad, el de la foto era el Capellán Militar de aquel entonces, pero los talibanes kirchneristas tienen disociado el concepto tiempo-espacio y para ellos probablemente la dictadura terminó en el 2003.


La verdad de Bergoglio es que nadie en la historia del catolicismo llegó tan alto realizando su carrera en la calle, entre la gente, viajando en transporte público, caminando las villas, y molestando al propio poder eclesiástico con sus declaraciones, llegando a llamar hipócritas a quienes negaban el bautismo a hijos extramatrimoniales y de padres solteros. Y en este lado del mundo, no hubo nadie con poder eclesiástico que le diera tanta bola a la labor con los pobres, no sólo en evangelización, sino en contención social. Los datos con los que Bergoglio contó siempre, no los proporcionaba el Indec, sino la Vicaría que él mismo creó y de la cual se nutrieron las oficinas públicas para llevar a cabo las primeras tareas de contención de la pobreza.
Como dije al principio, al kirchnerismo no le gusta que le marquen la cancha y cualquiera que los critique o ponga en evidencia se convierte automáticamente en un enemigo al cual, como una manada de lobos, saldrán a atacar sin necesidad de que "La Patrona" les dé ninguna orden. Claro que esta vez la pifiaron fiero y la Madama tuvo que salir a sofrenarlos y ponerlos en la senda que la lleve a no perder los votos de la feligresía  católica.


La anarquía, la destrucción de las instituciones, valores morales y buenas costumbres no son objetivos de Bergoglio hoy Papa Fracisco I.
De ella sí.
Aunque para ser sinceros y como dice RDP, si Néstor viviera en vez de ceder en su capricho, hoy estaríamos reformando la Biblia, deportando curas y convirtiendo las iglesias en cooperativas.

Taluego.

Consultamos y copiamos parte del texto a : http://www.relatodelpresente.com/
Clarín.com

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